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Actividad sugerida módulo 4

Actividad sugerida módulo 4

de CADS Capacitaciones -
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Escena 1 "se hace la importante"

Daniela, docente de séptimo grado, se encuentra con la siguiente conversación en las redes entre dos estudiantes:

“Natalia: Martina se hace la importante pero no lo es.

Teo: es porque no le da la cabeza”.

Se pregunta si intervenir o no ante un diálogo entre los estudiantes en los entornos digitales. Sin embargo, advierte que Natalia y Martina eran amigas cuando inició el año pero ya no lo son más, recuerda que hace unos días atrás la docente de Matemática le comentó que durante sus clases Martina agrede en forma constante a dos de sus compañeras, algunas veces lo hace también con Natalia, aunque no es ella el blanco preferido de sus agresiones.

En reunión de docentes se lo comenta a sus colegas. Algunos opinan que Martina es muy provocadora y que es de esperar entonces que sus compañeros hablen así de ella, que tiene celos de dos de sus compañeras a las que generalmente “les hace la vida imposible”.

La directora pregunta de dónde saldrá la idea que tienen los chicos de que “no le da la cabeza”. Algunos docentes, la de Matemática entre ellos, opinan que es muy lenta y que le cuesta mucho entender la materia, que muchas veces se niega a responder o a pasar al pizarrón para resolver un ejercicio.

Otros disienten con esta apreciación. Daniela, que es docente de Lengua, opina que Martina es desprolija y que tiene muy mala ortografía, pero que tiene mucha imaginación para escribir historias, que lo hace con gran sensibilidad y utilizando recursos literarios muy genuinos.

La directora aprovecha el comentario para decir que todos podemos destacarnos en algo y tener más dificultades en otras cosas, pero que eso no significa que “no nos da la cabeza”. Pregunta si les parece que puede haber alguna relación entre el rol de provocadora que este año asumió Martina y la representación que sobre ella asumieron sus compañeros. Se pregunta –y les pregunta- además si Martina habrá asumido la representación de “la que no le da la cabeza” como propia.

Una docente aventura una hipótesis: ¿no será que trata de ocultar bajo la máscara de “la provocadora” que le cuesta seguir las explicaciones del docente? Apoyando la hipótesis de su colega, otros aportan que justamente en las materias que más le cuestan es cuando más molesta, que esto no pasaba cuando recién empezaron las clases, que tampoco parece casual que sus compañeras a las que agrede son chicas que tienen excelente rendimiento académico.

Entonces la Directora plantea que tal vez en la tarea escolar sólo se destacan los que entienden rápidamente determinado tipo de contenidos, y abre un desafío: ¿qué podemos hacer desde la escuela para que todos puedan ser reconocidos por algún rasgo que los singularice asegurándose de ese modo un lugar en el grupo?

Un docente propone hablar con los chicos sobre qué es eso de que no le da la cabeza. Se producen rumores. Algunos opinan que no hay que meterse porque fue un diálogo entre ellos y que la escuela sólo tomó conocimiento debido a que el tutor participa en las redes. No todos piensan igual y discuten acaloradamente.

La directora propone dejar para más adelante el debate que es muy interesante y muy a tono con la época porque hace a los vínculos en los entornos digitales. Expresa que en su opinión probaría poniendo en acción, no necesariamente explicitando el problema ya que le preocupa que en caso de hacerlo se termine estigmatizando a Martina más todavía.

La docente de Plástica recuerda que en una oportunidad los chicos hicieron un mural con fotografías y que Martina demostró gran interés por la actividad.

Luego de decidirlo entre todos, la docente de Plástica propone a Martina que se haga cargo del equipo que toma fotografías para la Revista de la escuela. Explicita, ante el grupo, la afinidad que tiene Martina con esta actividad y les recuerda lo bien que se desempeñó cuando hicieron el mural.

Martina acepta un poco a regañadientes. Pero durante el transcurso de la actividad, se va entusiasmando. Tiene gran sensibilidad para capturar escenas cotidianas de la gente del barrio. Sus compañeros valoran las fotografías que ella toma. Finalmente para la edición del suplemento eligen entre todos las fotos que serán publicadas, muchas de ellas son las que tomó Martina.

Martina encuentra un lugar en el grupo. Ya no es más Martina, “la que no le da la cabeza” sino Martina, “la fotógrafa”. Matemática le sigue costando pero ya no siente vergüenza y sus compañeros no se burlan de ella. La identificación a la fotógrafa parece haberle permitido superar la representación de “la que no le da la cabeza” y por lo tanto separarse de la de “provocadora” con la cual intentaba disimularla.

En la siguiente reunión de docentes del curso, evalúan entre todos los resultados positivos de la intervención. La Directora propone una serie de encuentros con los docentes de toda la escuela para pensar sobre la tarea escolar que cotidianamente proponemos a nuestros estudiantes. ¿Promueve la valoración de algunos rasgos más que otros? ¿Por qué la capacidad para seguir la explicación de un profesor es tan valorada mientras que el interés por la fotografía pasa prácticamente desapercibido? Acuerdan entre todos seguir trabajando para encontrar nuevos recursos al servicio de la enseñanza y el aprendizaje.

La intervención ha tenido, sin lugar a dudas, efectos valiosos: Martina encuentra un lugar de reconocimiento y para la escuela se inicia un prometedor proceso de aprendizaje institucional.


Escena 2 "las divinas"

Josefina es alumna de primer año de una escuela técnica. Es citada por Beatriz, su docente, para conversar acerca de problemas que viene teniendo con sus pares.

“Le pegué porque se hace la linda” dice de Paula, cuando Beatriz le pregunta por qué trata de ese modo a su compañera. Cuenta que Paula integra junto con otras amigas un grupo que se autodenomina “Las divinas”. La condición para pertenecer es ser rubia, de tez clara y delgada. Ya algunas chicas del curso, Josefina entre ellas, habían pedido ser parte de él pero fueron rechazadas por no cumplir con alguno de estos rasgos físicos. Josefina dice que sus compañeras “la rebajan”, que le dicen que es “negra y fea”. La docente le dice que no está bien el modo en que actúan sus compañeras pero que eso no justifica que ella las maltrate. Le advierte que de haber una próxima vez deberá sancionarla.

En la reunión de profesores, Beatriz relata la situación y la respuesta que obtuvo por parte de Josefina. Algunos docentes entonces comentan que la discriminación con pretexto de aspecto físico y por vestimenta es frecuente entre los chicos de la escuela. Dicen que si son gordos o muy flacos, si son morochos, si tienen granos en la cara, si usan anteojos, si se visten de modo diferente al resto, puede ser motivo de burlas. Las burlas son rotativas aunque, en algunas ocasiones se “agarran con uno”, lo “toman de punto”, lo acosan.

Se preguntan cómo pueden contribuir desde la escuela para que los chicos reflexionen sobre los propios prejuicios, acepten el propio cuerpo y se relacionen con los otros desde una actitud pluralista, de valoración de las diferencias y de respeto mutuo.

Una docente propone un taller sobre discriminación. El coordinador de talleres sugiere algo que le parece mejor: un Taller de reciclado de ropa. La idea sería que cada estudiante confeccione ropa que le quede bien a cada uno de acuerdo a sus características físicas, no ropa estereotipada sólo para quienes cumplen con determinados parámetros. Comenta que la experiencia podría ser una oportunidad privilegiada para analizar cómo percibimos lo corporal, qué representaciones tenemos sobre el cuerpo, para a partir de allí cuestionar los prejuicios, que están a la base de las actitudes discriminatorias.

Los docentes se entusiasman con la idea y proponen crear una línea que se denomine “Ropa para vos, ropa con personalidad”. Deciden entre todos llevar adelante la propuesta. En el taller, conversan sobre la importancia de aceptar a cada quien como es, que la belleza de cada uno de nosotros consiste precisamente en que somos seres únicos, irrepetibles. Sin embargo, la moda, los medios de comunicación, las propagandas, los concursos de belleza, determinan lo que consideramos “lindo o bello”, quien no responde a ese modelo es excluido y se siente excluido. Buscan en el diccionario el significado del término: “moda” significa justamente eso, lo más frecuente, pero la belleza del ser humano radica en su singularidad.

Las y los estudiantes investigan moda y estándares de belleza en diferentes épocas y culturas. Analizan pinturas y poemas de otros tiempos y llegan a la conclusión de que la mujer flaca no siempre fue ícono de belleza, que para sus bisabuelos la robustez era sinónimo de salud, bienestar y esplendor físico.

Durante el transcurso del proyecto, en el curso de Paula y Josefina, surge el tema de “Las divinas”. Conversan entre todos sobre ello. Beatriz traza una línea en el piso, y pide que se ubiquen a la izquierda todos los que alguna vez se sintieron discriminados. Así se llevan una sorpresa, ya que todos, incluso las chicas que integran el grupo “Las divinas”, alguna vez se han sentido discriminadas por alguna razón. Cuentan entonces qué sintieron en esa oportunidad y finalmente conversan sobre la importancia de valorar al otro tal cual es.

A fin de año cada uno desfila la ropa que confeccionó. Desfilan todos, no sólo los que responden a ciertos parámetros, porque justamente ese es el objetivo del desfile: mostrar lo realizado y que acepten su cuerpo y el de los demás, que es único. Que aprendan a valorar la pluralidad.

 1. La situación ha sido recreada pero la idea original es tomada de una experiencia llevada a cabo por docentes y estudiantes secundarios de la especialidad de Diseño de Indumentaria de la escuela Raggio, en la Ciudad de Buenos Aires. La misma ha sido plasmada en el video “Los cuerpos”, de la serie Igual de diferentes producida en colaboración con el INADI.


Actividad:

¿Considera que a la resolución que brinda la escuela subyace un enfoque centrado en el individuo o un enfoque relacional/institucional? Justifique su respuesta.